martes, 17 de agosto de 2010

Edición Especial de Agosto


Cómo pasa el tiempo, hace tan sólo unos días que mi Jirafita y yo cumplimos el año y cinco meses de relación en pleno apogeo de nuestro segundo verano.


Últimamente, cuando he bajado de nuestro propio mundo a este que llaman Tierra, al hablar con otras personas observo y compruebo atónita como su amor se apaga. O más bien se va diluyendo con el transcurso de los días "eso" al lo que ellos llaman o confunden con amor.


Las comparaciones son horribles pero la verdad poderosa. Y al ver como nuestro amor sigue inquebrantable, usando los meses como barca sobre el que surca las turbulentas aguas de la vida puedo decir que siento terriblemente afortunada y orgullosa de nuestro amor, de nuestros sentimientos y acciones, de que seamos tan distintos al resto de personas.


Curiosamente andaba yo con estas cavilaciones internas, cuando una de estas tardes de agosto salieron de tus labios unos versos anglosajones, susurrados que venían a decir: - En el mundo hay dos tipos de personas: a) Mi amor y yo b) Los demás -


Estas cosas hacen que afirme que nuestras mentes y corazones están más conectados de lo que puede parecer o se habitual. Después de todo no pude evitar soreirme con ese gesto tan espóntaneo y adorable de igual modo que suelo hacerlo cuando la gente dice que hacemos buena pareja, porque los pobre ingenuos no saben que nosotros somos LA PAREJA en el sentido más profundo y hermoso de la palabra.


Tal y como podéis leer he decidido tomarme este mes de vacaciones y no relatar nuestras acciones pues quiero disfrutarlas en la más estricta intimidad, dejando que los últimos coletazos de esta luz estival sigan envolviendo cada minuto que paso a su lado, deleitándome con este amor tan afortunadamente distinto al resto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario